Escribir es una de las actividades psicomotrices más complejas de todo ser humano, escribir con lápiz favorece el desarrollo del cerebro, tanto que se suele comparar con los beneficios que tiene la actividad física. Según Evelyn Aguilera, psicóloga, calígrafa y grafóloga forense, Bachiller en Comunicación y Máster en Documentoscopía de la Universitat de Barcelona, creadora del Sistema Neuroescritural y directora académica del Instituto de Técnicas Neuroescriturales (INGPEC) “se considera la gimnasia cerebral más potente para un ser humano, una actividad que mantiene a tono este órgano, por lo tanto, no escribir sería como no tonificar la musculatura”.

Según los expertos, cuando se escribe a mano afloran aspectos relativos al orden, la limpieza, el cuidado y la minuciosidad, y también conductas vinculadas con la expresión de ideas y sentimientos. “Escribir brinda la oportunidad de poder acceder a nuestro innato potencial creativo, así como a descubrir nuestras emociones y pautas de pensamiento más inconscientes, lo que favorece a un desarrollo no tan solo cognitivo, sino también de autoconocimiento” asegura Karla Anavalón, profesora y directora editorial de Caligrafix.

Sin embargo, hoy día, se puede observar una despersonalización de la escritura con el manejo excesivo de la computadora desde temprana edad. Se ha comprobado que muchos niños de cinco y seis años comienzan a escribir sus primeras palabras pulsando en forma mecánica las teclas de la máquina y no afianzando la destreza motriz con uso del lápiz.

El mayor acontecimiento en el aprendizaje de nuestros niños, es probablemente aprender a escribir, y en ese sentido muchos padres nos preguntamos cuál es la mejor forma de acompañarlos en ese proceso. Una de las primeras preguntas que surgen es qué tipo de letra escoger: letra imprenta o letra ligada.

La letra de imprenta es una forma de escritura vertical, muy limpia y sencilla, sin ningún adorno, en el que las letras suelen escribirse sin ligaduras entre ellas. Es una letra mucho más fácil de realizar, ya que no necesita un control de trazo tan exhaustivo, se podría decir que su forma es más rectilínea. Es una letra muy usual en la vida que nos rodea. Se llama letra de imprenta porque es la que se ha usado en la impresión tipográfica tradicional.

La letra ligada (letra corrida o cursiva) es un tipo de escritura en el que, como su propio nombre indica, todas las letras de la palabra están ligadas siempre, dando sensación de unidad (corriente Montessori). El niño apenas tiene que levantar el lápiz de la hoja para hacer los trazos, entrelazando las grafías hasta construir la palabra completa, favoreciendo la coordinación ojo-mano y ayuda a aumentar el tiempo de concentración y atención.

¿Pero, porque usar letra ligada o cursiva?

Este tipo de letra, exige a los niños una mayor concentración y un trabajo de motricidad fina y coordinación mayor que la letra de imprenta a la hora de escribir ya que las letras se encuentran entrelazadas, desarrollando habilidades no solo de control motor fino, sino también de integración bilateral y visual, planificación motora, propiocepción, atención sostenida y percepción sensorial de los dedos.

Además, evita errores de rotación, es decir, de sustituciones de letras de las que llamamos en espejo. Por ejemplo, la letra ligada evita la confusión de b y d o de a y e, mientras que en la letra de imprenta estas letras son exactamente iguales pero giradas y, por tanto, es más fácil confundirlas.

Es igual una herramienta crucial para el desarrollo cognitivo particularmente para entrenar el cerebro desde el punto de vista del rendimiento óptimo del mismo. Mediante el aprendizaje de la escritura en letra ligada, el cerebro, desarrolla una especialización por áreas, que integra la sensación, el control del movimiento y el razonamiento. Así mismo, se necesita un cierto nivel de control de motricidad fina sobre los dedos. Los alumnos deben prestar atención y pensar qué están haciendo y cómo lo están haciendo.

Está probado que las personas que redactan y utilizan letra cursiva, escriben fluida y libremente sus ideas sin interrupción, mientras que las personas que tienen que redactar y utilizan la letra de molde interrumpen el flujo de ideas, tal y como se interrumpe la escritura al escribir letra por letras, es decir no hay una continuidad.

Otorga a la escritura una calidad personalizado que refleja las diferencias individuales en forma matizada y fina. La escritura manuscrita cursiva, caracteriza a una persona tal como el tono y timbre de su voz o su modo de caminar. Cada uno es capaz de reconocer su letra y la de sus conocidos. La letra imprenta o la escritura a máquina no satisfacen esta necesidad de expresión personalizada.

Algunos aspectos de este tipo de escritura que se deben considerar son:

  • Mejor retención en la memoria, pues presenta una acción motora continua.
  • Una vez aprendida la letra ligada, es más fácil aprender la imprenta, factor que no se da al aprender primero la escritura imprenta y después la ligada.
  • Quienes utilizan letra ligada tienden a escribir con mayor fluidez y sin interrupción de sus pensamientos. La letra imprenta detiene más el flujo de ideas, ya que no se produce continuidad al tener que levantar el lápiz al escribir letra por letra.
  • Favorece el desarrollo de la coordinación óculo-manual y de la motricidad fina.
  • Ayuda a la concentración y al desarrollo motor.
  • Es eficaz a la hora de reducir los efectos de la dislexia, en el proceso de la decodificación del lenguaje.
  • Favorece la velocidad de la escritura pues no se levanta el lapicero con tanta frecuencia
  • Ayuda a mantener los espacios correspondientes entre letras y palabras, y evitar así escritura en carro (juntar todas las letras en una oración), algo especialmente relevante en los primeros años escolares
  • Otorga a la escritura, una calidad personalizada, entre otros.

El aprendizaje de la escritura es de una gran complejidad por el número de habilidades que requiere en su ejecución. Esto indica que existe la posibilidad de que los niños enfrenten muchas dificultades en el proceso de adquisición, es por eso que requieren de nuestro acompañamiento. Algunas pautas para acompañar este proceso:

  • Enseñar a sujetar bien el lápiz
  • Sentarse de forma adecuada
  • Dedicar a la actividad de escritura el tiempo justo (no es aconsejable que se haga por períodos largos y se sugiere considerar siempre la edad del niño y el tiempo real de concentración que tiene)
  • Impulsar la creatividad

Bibliografía:

https://www.caligrafix.cl/

https://www.greenschool.com.mx/

https://www.andespuebla.com/

Por Carmen Arciniega

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