Hoy en día son múltiples los estudios que mencionan los beneficios de la gratitud, principalmente porque aporta a nuestro bienestar emocional y nos lleva a tener una mayor satisfacción con la vida en general. Sin embargo, a pesar de que los efectos positivos de la gratitud son cada vez más conocidos, en la actualidad muchos nos encontramos principalmente focalizados en alcanzar metas y cumplir deseos a futuro, por lo que dejamos de lado lo que ya hemos alcanzado y lo que tenemos, es decir, olvidamos la importancia de sentirnos agradecidos por ello.

¿Qué significa vivir en gratitud?

La gratitud implica reconocer que se ha obtenido un resultado favorable, el cual genera una experiencia afectiva de agrado. Vivir en gratitud es una actitud, una forma de vida, una virtud y un hábito. Asimismo, es una decisión, la cual implica focalizar nuestra atención en los aspectos positivos de nuestra vida y valorarlos, en lugar de darlos por hecho y enfocarnos en lo que nos falta o quisiéramos que fuese diferente. De esta manera, vivir en gratitud requiere un compromiso y puede darse, en diferentes medidas, en los mejores momentos de nuestras vidas y en los peores.

A diferencia de estar agradecido, vivir en gratitud no es simplemente una respuesta emocional a un hecho concreto ni está dirigida específicamente a una persona, sino que está marcada por su carácter transpersonal, abarcando un sentimiento amplio de aprecio y agradecimiento con la vida.

En ocasiones ocurre que nos encontramos en una situación problemática, la cual nos lleva a creer que es necesario que nuestra atención esté enfocada únicamente en lo que nos gustaría cambiar y superar y que recién cuando esto ocurra podremos sentirnos bien. Sin embargo, en realidad la gratitud es una herramienta clave para lograr esto, porque reconocer lo que afortunadamente poseemos y hemos logrado, nos permite conectar con aquello que nos hace sentir bien. Además, a pesar de que inevitablemente viviremos situaciones que nos traerán malestar y que no podremos evitar, vivir en gratitud nos ayudará a reducirlo y a tener una visión más optimista de la situación, así como a tener presentes herramientas que tenemos a nuestro alcance para sobreponernos.

Adicionalmente, muchos damos por hecho algunas cosas y recién cuando dejamos de tenerlas nos damos cuenta de los beneficios de las mismas y nos arrepentimos de no haberlas apreciado más. Vivir en gratitud se relaciona con el dicho “no esperemos a perder algo para comenzar a valorarlo”, pues implica tener presente la fortuna que tenemos de poseer cosas “simples” pero tan relevantes, como levantarnos cada día teniendo salud, un techo y un plato sobre la mesa.

5 estrategias para comenzar a vivir en gratitud

  1. Decide hacerlo y comprométete: como seres humanos, tenemos la tendencia de dar más relevancia a lo negativo, por lo que al comienzo, querer ser más agradecidos no bastará para serlo de manera automática, sino que tendremos que esforzarnos para reenfocar nuestra atención cuando ésta se encuentre dirigida a algo que esté nublando nuestras bendiciones, y para tomarnos un tiempo al día para agradecer. En un inicio esto nos puede resultar raro o difícil, pero con el tiempo, nos costará menos y podremos instaurarlo como un hábito, llegando incluso a hacerlo de manera automática.
  2. No te enfoques demasiado en lo que te falta: es importante plantearnos metas y tener claro qué nos gustaría obtener a futuro, pero muchas veces pasamos demasiado tiempo pensando en ello y dejamos de lado lo que hemos obtenido a lo largo de nuestra vida. Tener esto último presente nos trae bienestar y nos permite aumentar la influencia que tienen en nuestra vida.
  3. Tómate unos minutos al día para reconocer aquello por lo que te sientes afortunado: ya sea escribiéndolo o simplemente pensándolo, es importante tener un espacio especial para hacerlo.
  4. Demuéstrale a tus seres queridos que estás agradecido por tenerlos en tu vida: esto va a traerles alegría y te ayudará a tener presente y conectar con aquello que te hace bien.
  5. Agradece las dificultades que se te presentan: los momentos difíciles no serán agradables, pero si hay algo que debemos agradecerles, es la oportunidad que nos brindan de detenernos, analizar la situación y buscar hacer cambios que nos permitan crecer y superarla. Sin minimizar el malestar que nos pueden causar, busquemos mirar estos momentos como oportunidades para salir fortalecidos.

Comenzar a vivir en gratitud es un viaje que te permitirá ver la vida y las situaciones que se te irán presentando, buenas o malas, con otros ojos. “La gratitud es la forma en que el corazón recuerda: recuerda las bondades, las interacciones apreciadas con los demás, las acciones compasivas de extraños, sorpresas, regalos y bendiciones diarias. Al recordar honramos y reconocemos las muchas formas en las que quién somos, ha sido moldeado por otros” (Arrien, 2011).

Referencias

Arrien, A. (2011). Living in gratitude: A journey that will change your life. Sounds True.

Manso-Pinto, J. (2013). Emmons, Robert A.; McCullough, Michael E.(Eds)(2004). The Psychology of Gratitude. Oxford University Press, Inc. pp. 368. Revista Latinoamericana de Psicología, 45(2), 307-308

Por Maya Sordo – Practicante

Edición y corrección: XMM

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